viernes, 15 de febrero de 2008

LO QUE SÉ, SI ES QUE SÉ


Cierto día mientras navegaba por el mundo virtual me topé con un blog muy particular donde se abordaba el tema del conocimiento en las relaciones interpersonales. Contaba una anécdota que suele suceder de una persona que aparentemente se daba cuenta que luego de tanto compartir, realmente no conocía a ese alguien. El conocimiento es tan universal y tan amplio que podríamos pasarnos la vida tratando de saberlo todo pero jamás lo lograremos. Lo curioso es que apenas lo comprendo. Romper este paradigma no ha sido de la noche a la mañana. A la anécdota contada, le agrego otra: Me encontraba en mi clase de Teoría Contable cuyo tema para ese día era precisamente EL CONOCIMIENTO. El discurso del profesor (Alexander Rodriguez) se basaba en que las personas apoyaban muchas causas ignorando el pasado; para ser exactos se refería a la marcha del 4 de febrero de 2008 (marcha contra las farc). Él encontraba inconcebible que muchas personas se atrevieran a decir que nuestro presidente es el mejor que hemos tenido, entonces se preguntaba ¿conocen la historia del país? ¿saben que hicieron los anteriores presidentes?. Reconozco que estas preguntas tocaron mi fibra y dije para mis adentros: “realmente se muy poco o no sé nada”. En este caso creo que deberíamos aplicar la máxima del Platón “conocer es recordar” y empezar a recoger el pasado para tener argumentos en pro de la causa que sea sin obviar el contexto actual.

Estamos en un mundo de máscaras, un mundo donde las personas se presentan como objetos más que como sujetos ¿por qué? Porque el consumismo ha invadido el espacio personal, la actitud y prácticamente destruye la autenticidad de quienes no son capaces de ser distintos en un mundo cada vez uniforme “sino piensas como todos, no vales o estás loco”. ¿Y donde queda el otro? El otro, ese alguien con quien compartimos (aparentemente), ese alguien con quien estudiamos, trabajamos o nos cruzamos por la calle es totalmente desconocido ¿por qué? Porque vivimos ocupados en tener más que en ser y ser también implica tratar de conocer al otro. Pero para llegar a ese conocimiento debo partir por mi como bien dice la inscripción “conocete a ti mismo” gnosti te autvn (nosce te ipsum) puesta por los siete sabios en el frontispicio del templo de Delfos y pieza clave de la filosofía de Socrates (sólo se que nada sé) que a mi criterio es muy profunda. No obstante conocerse interiormente es bastante difícil teniendo en cuenta que confundimos lo que somos con lo que quisiéramos ser o con lo que otros quieren que seamos o con lo que imaginamos somos, además que parece más fácil recargar en otros las culpas propias para justificar la incapacidad de enfrentarnos a nuestras propias acciones con sus consecuencias.

Me doy cuenta que lo que sé no es la décima parte de lo que no sé y me digo entonces como Descartes: “Daría todo lo que sé, por la mitad de lo que ignoro”. Entonces, como ser humano hoy soy alguien y mañana la misma en versión mejorada cada vez que mi mochila se llena de conocimiento.

Maryory V

9 comentarios:

  1. Mira que definitivamente en Internet se vé de todo, hay cosa buenas y otras malas. Howard Gardner "opina" (no es doxa) que el ser humano tiene varias inteligencias, una de ellas es la interpersonal.

    Creo que hay varios tipos y formas de conocer, una de las formas de conocer es mediante la razón pero creo que la mejor manera de llegar a "conocer" es involucrar la mayor cantidad de sentidos posibles. Hay razones del corazón que la razón no entiende, no todo es razón y somos, los seres humanos más locura(inconciencia, subconciencia) que conciencia.

    César Ruiz.

    ResponderEliminar
  2. Totalmente impresionada mi reina... Excelente pregunta: ¿Que es lo que realmente conocemos?.
    Mas bien creo que en la vida vamos re-conociendo aquello que ya es parte de nosotros, y que el conocimiento forma parte de darnos cuenta de ello.

    Un abrazo :)
    Yamel

    ResponderEliminar
  3. Me uno a tu blog en mi cadena de lecturas, prefiero las lecturas en 1 persona, son reflejo de una realidad mas cierta.

    Besos,

    nos encontramos en la red de nuevo!

    ResponderEliminar
  4. El hombre-masa se siente perfecto. El hombre mediocre de nuestros días no duda de su propia plenitud. Por eso no lee. Porque no le gusta y porque no cree que nada más necesite para sí. Cree que en realidad no hace falta saber mucho más y que todo lo demás es sólo aburrimiento, pedantería e impostura.

    ResponderEliminar

  5. Cordial saludo a todos y a todas:
    Creo que, en términos generales, si se le pregunta a una persona normal si se siente como una pequeña parte del engranaje social y no alguien único e irrepetible responderá que es único, especial y no una simple tuerca del engranaje (a no ser que sea una persona que esté deprimida, con una enfermedad grave, con muchos problemas tenaces, en la cárcel...) Leer no te hace más sabio o mejor persona, muchas personas muy estudiosas han matado o han permitido a otros matar, igualmente hay personas que no saben ni escribir Hacienda con "H" y sin embargo han sido capaces de lograr muchas de sus metas, alguna vez me dije que era mejor escribir que leer, para mí escribir es un reto más que leer. Quiero justificar aún más a aquellos que no leen, en este tiempo hay tanta información, que algunos hablan de infoxicación.

    ResponderEliminar
  6. Señor Carc, estoy de acuerdo en buena parte de su comentario. Le aclaro que yo no he dicho que leer automáticamente te hará más sabio. Simplemente he dado a entender que una buena lectura puede aumentar tus probabilidades de potenciar tu sabiduría, de salirte del provincianismo y del dogmatismo de plenitud que vive la mayoría.

    En lo que no estoy de acuerdo es en esa expresión: “Quiero justificar aún más a aquellos que no leen, en este tiempo hay tanta información, que algunos hablan de infoxicación”. Primero: No confunda el ser defensor de los pobres, con ser el defensor de la chusma. Pues mientras los pobres estamos escasos de recursos económicos, muchas veces involuntariamente. La chusma esta escasa de cultura y muchas veces de manera voluntaria, pues la desprecian. Y que ironía, si, la chusma esta intoxicada, pero solo de decadencia: Protagonistas, futbol, telebobelas (chismes televisados), farándula (más chismes de celebribobos), basuroton, porno… en fin.

    ResponderEliminar
  7. Hola Yunni:
    Cordial saludo y un feliz fin de año. Estoy leyendo el comentario y voy a expresar con respecto al leer que efectivamente una buena lectura es como un buen amigo, algo difícil de encontrar, a veces, alguien dijo, una buena lectura lo salva a uno de sí mismo.

    La infoxicación nos afecta a todos, no sólo a los pobres o ricos ya que se refiere al "trastorno intelectual producto de la incapacidad de analizar y comprender una lluvia de información como la que pueden proporcionar los medios electrónicos actuales". Es decir, la infoxicación es característica de nuestra sociedad sobresaturada de información no un fenómeno exclusivo de alguna clase social en particular.
    César Ruiz

    ResponderEliminar
  8. Señor Augusto. Estoy totalmente de acuerdo con su último comentario, solo aclaro esto de mi comentario: No he dicho que la chusma sea exclusiva de la clase pobre ¡Gracias por su atención!

    ResponderEliminar
  9. Hola Carlos y Yunni, muchas gracias por sus comentarios en este blog que he descuidado. He aprendido mucho.

    Ya me pondré al día, no he estado muy inspirada que digamos pero he encontrado tema para deleitarlos. Trataré de publicar lo más pronto posible.

    Feliz navidad y próspero año nuevo.

    ResponderEliminar

Google