miércoles, 10 de septiembre de 2008

OBSERVANDO EL MUNDO


Hace poco observe el mundo y me di cuenta, o mejor dicho, siempre he sabido que el mundo no avanza retrocede o se estanca. ¿Qué diferencia hay entre ayer y hoy en la historia de la humanidad?

Hoy es más fácil comunicarse con otros a millas de distancia pero hemos perdido la comunicación con quienes están tan cerca. Tenemos muchos avances en salud pero solo unos pocos pueden acceder a ellos. Hay mejor calidad de vida pero menos naturaleza. Encontramos información por todas partes, mucha de ella nociva para el alma.

El poder, no ha cambiado. Se siguen matando entre naciones por él. Se intenta cambiar al otro a la fuerza olvidando su derecho a ser diferente. No es permitido disentir en algo porque el lema de ahora y siempre es “sino estas conmigo estas contra mí”.

El enemigo puede ser cualquiera hasta tu familia. Las pasiones desbordadas acaban con todo.

Las personas van más allá de lo que ven sus narices, prefieren que otros le cuenten y se arriesgan a ser manipuladas.

No es esto un escrito pesimista pues aun en medio del infierno encontramos algo de paraíso. Yo encontré el mío en la literatura, el arte, la danza y el asombro cuando a pesar de todo puedo ver la luz de cada nuevo día.

¡Encuentra el tuyo!

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