Mi gran problema ha sido aceptarme como soy. Este es un reto con el que convivo todos los días. Lo mejor de mi problema es que me ha permitido derribar los muros que yo misma me he impuesto. Alguna vez me pregunté: - ¿ Qué seria de mi vida si fuera distinta, si no tuviese las "limitaciones que tengo", si...?. Creo que mi vida como ha sido me ha dado más satisfacciones que si tuviera lo que me falta.
No comprendo entonces por qué añoro lo que no tengo cuando lo que poseo me ha dado tanto. La perfección no existe, sin embargo, me empeño en obtenerla. ¿Es culpa mía? - No del todo. Vivo en una sociedad de consumo que muestra la máscara, silueta y modelo que se debe ser. No encajar es sinonimo de diferencia.
La belleza se ha elevado a la máxima condición que debe tener una mujer como si eso fuera suficiente. Ella por sí sola no hace una persona, no hace una dama.
No anhelo tener curvas de impacto, me encanta tener el sello que imprimió la vida cuando nació mi hija. Ella es mi mayor logro, es quien alienta mis luchas diarias para superar mis miedos. Un amor tan genuino, tan libre de prejuicios, tan dispuesto a entregar lo mejor de sí, es lo que recibo todos los días al llegar a casa. Tengo tanto que aprender de mi niña. Alguna vez leí ¿cómo hacen los niños para disgustarse con otro y al momento estar jugando como si nada? -No sufren de orgullo, no lo conocen, su amor es más grande que nada.
De todas formas, continuo sin resolver mi problema: mis autolimitaciones. Un problema que coarta mi creatividad y el logro de mis sueños.
No comprendo entonces por qué añoro lo que no tengo cuando lo que poseo me ha dado tanto. La perfección no existe, sin embargo, me empeño en obtenerla. ¿Es culpa mía? - No del todo. Vivo en una sociedad de consumo que muestra la máscara, silueta y modelo que se debe ser. No encajar es sinonimo de diferencia.
La belleza se ha elevado a la máxima condición que debe tener una mujer como si eso fuera suficiente. Ella por sí sola no hace una persona, no hace una dama.
No anhelo tener curvas de impacto, me encanta tener el sello que imprimió la vida cuando nació mi hija. Ella es mi mayor logro, es quien alienta mis luchas diarias para superar mis miedos. Un amor tan genuino, tan libre de prejuicios, tan dispuesto a entregar lo mejor de sí, es lo que recibo todos los días al llegar a casa. Tengo tanto que aprender de mi niña. Alguna vez leí ¿cómo hacen los niños para disgustarse con otro y al momento estar jugando como si nada? -No sufren de orgullo, no lo conocen, su amor es más grande que nada.
De todas formas, continuo sin resolver mi problema: mis autolimitaciones. Un problema que coarta mi creatividad y el logro de mis sueños.
Maravillosos pensamientos que afloran a tu mente y trascienden tus límites, debemos eliminar esas barreras que nos creamos absurdamente. Eres una excelente pensante. Te expreso mi admiración y mi aprecio.Maritza
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